domingo, 5 de febrero de 2017

la crueldad de lo fértil

dije anoche,
reducido a un ruego

"parad"

aún cuando en verdad, nunca quise decir.

¿seré culpable
por no querer que arrebatasen mis manos

de mi rostro

incompleto?

un blanco sobre una clavícula rota.

engranaje
que se ahonda.

¿que respondo a lo que me toca bruscamente?

¿soy yo lo que duele
o es el hueso empobrecido?

el aire calla
de tan enfermo de muerte

¿como afrontar 
la dominancia del silencio,

si no es amordazado 
por lo endeble de mí mismo?

cautiverio.

recuerdo haber cerrado los ojos
como en ningún otro sueño.


fugué mi boca
a otro estado,

donde era voz,

aún cuando nunca quise haber dicho nada.

¿qué diré mañana, entonces
cuando reducido a un cuerpo, vista mi nombre?

aún a pesar de querer estar vestido de lecho.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario