viernes, 25 de septiembre de 2015

Ilusión

"por qué no pediste permiso para destruir al mundo?

que no ves que es tarde ya?"

tal vez sea mi voz,
aquel sonido quebrado 
que retumba ante tu piel;

acallándose palabra a palabra,

[el horizonte te ha tragado,
y no digo nada]

abrazo al silencio de un cuerpo que no es de nadie 
y mi respiración sincronizo con la suya

cada vez
se torna más lenta,


(y luego nada)

el frío ahora solo empaña el calor de mi cuerpo,

el otro ya es frío;

frío que se esconde en
la tierra, 

toda tuya la tierra,
y tus pies no están acá para sentirla

[es tarde ya y ninguna palabra he dicho desde que te fuiste]

¿que sabrá la tragedia de mi vida, si la tragedia ni siquiera ha de existir?

nada existe, solo es ilusión,

la ilusión de que te tuve alguna vez,

la ilusión de mi silencio,

la ilusión de otro cuerpo,

la ilusión de una tierra y una destrucción,

la ilusión de una tragedia,

la ilusión de mi existencia,

y la ilusión de una ilusión

martes, 22 de septiembre de 2015

¿Qué Tanto?

¿qué tanto duele ser?

mi piel está distinta hoy;

en todo el día no oí voz alguna

[ni siquiera la mía]

hoy mi cielo es el fin de mi habitación
y las nubes son las marcas de humedad;

olvidé hace cuanto desperté

e ignoro cuando volveré a dormirme;

[solo mi cuerpo me impide desvanecerme por completo]

mil setecientas treinta y ocho veces parpadeé hasta ahora

y mil setecientas treinta y siete veces pensé que era la última vez que lo haría

durante la última no recuerdo que sentí ni que pensé

[parpadeo]

mil setencientas treinta y ocho veces mis pestañas se besaron
por si era aquella, la última vez que lo harían

[les cautiva lo trágico del romance y yo pienso que voy a morir con los ojos abiertos]

segundo de oscuridad,

(suena el chasquido de un beso que pesa en agonía)

veo otra vez;

mi mente se aleja con cada intento de pensamiento
aun así en ella resuenan sirenas o algo parecido;

tal vez la policía esté bajo mi ventana y ni cuenta me de

tal vez alguien amaneció con siete disparos en la nuca

o quizás hayan venido por algo en el departamento de al lado;


creo haber escuchado gritos hace rato
y luego nada

nada, nada, nada, nada

¿que tanto duele ser, eh?

no sé,

hoy no fui
y no sentí ni dolor ni tampoco placer

no sentí nada;

¿qué tanto duele la piel rasgándose contra el suelo?

¿qué tanto duele ver la sangre caer del cuerpo propio?

¿qué tanto duele no ver al sol en mi techo?

[la probabilidad de nubes de humedad es alta
y persistirá hasta que el concreto desgastado caiga sobre mi cama]


¿qué tanto duele la sorpresa al saber que el hoy será un ayer?

¿qué tanto dolerá ser mañana?


espero no tanto

lunes, 21 de septiembre de 2015

Furia

la furia,

[como manifiesto del néctar espíritu] 

será concebida en cada uno de los cuerpos finitos,
como una expresión fugaz entremedio de lo incierto que una pizca de realidad 

consigo acarrea;

habrá de existir, entonces, dicha furia,

o solo existirá una rabia por lo ambiguo de la incertidumbre del sentir?

en todo caso, la furia, serena,
inunda una calma y solo con un decir la derrumba

y el silencio, casi extinto,

en mí ha de hallar refugio;

mi corazón súbitamente halla una pausa a su funcionamiento
y rápidamente retrocede para buscar su último latir,

y late;

enardecida la sangre, en aquel ímpetu por prevalecer
ante la desesperación de la agonía,

se bombeará a sí misma hasta atravesar mi piel;

mi vida se irá de mi;

la furia en un impulso 
                                                                       [precipitación]
tanteará en su energía, la eternidad;

[derrumbará la calma]

pero al ser un manifiesto del espíritu (parte del néctar del mismo)
fugaz, como él, habrá de sosegarse prontamente;

y luego,

calma de nuevo;

mi vida cual furia, será un grito en contra de la naturaleza
que pretenderá vivir su existencia en una armonía constante,

disonaré de ella,

y hallaré un clímax

que lentamente se irá apagando;

la furia (lo ambiguo) habrá de apaciguar a otra furia (yo),
[el silencio en mi, indicio de calma]

y seré luego de haber sido furia,

calma,

eterna calma,

eterna muerte;

miércoles, 9 de septiembre de 2015

Guerra

la palpitación flamea sobre el cuerpo;

el sol demora su salida
[sabe que algo pasa]

redobles repiquetean sobre la piel;

el corazón, como un arma de fuego
                                                   (hueco como el cañon)
se alza, disparando la pólvora de un primer amor, 

[el primer disparo aniquilará al silencio]

y tras rozar el cielo 
y herir la nube tras la cual se ocultaba el sol,

cae debilitada, para humear una neblina sobre la superficie del cuerpo,

disfrazado de campo de batalla;

[guerra entre dos frentes]

no habrá latido que no acaricie el vértigo de la guerra,

la sangre enardecida,
casi hierve bajo la piel;

los dos corazones enfrentados
flamearán más que nunca sus latidos,
que emoción tras emoción,

se volverán un latido continuo

y volverán a encender sus mechas

y volverán a disparar;

quizás ya alguien haya salido herido;

la sangre tras la herida causada
por algún perdigón perdido, salará

y brotará
gota a gota;

procuraré que no sea yo quien desangre mis ojos 
en alguna compleja tribulación,

no alzaré bandera blanca;

[vuela la pólvora]

"y quien sabe cuanto tiempo durará la enfrentación?

solo es sabido
que el fin de la guerra será

cuando aquel corazón que se vea derrotado llore una tristeza

y el victorioso flamee indiferencia

con su latir;

[seráelfindelamor]"

domingo, 6 de septiembre de 2015

La Cuadra

cruza la calle,
y él es un naufragio en un mar de alquitrán;

las huellas de autos cuyos viajes,
en algún punto, tantearon aquella superficie,

tratan de guiarlo;

alegría;

[tierra a la vista]

ahora besa las baldosas rotas por las raíces de los árboles viejos,

sangra un poco;

la tierra ahora lleva consigo una parte de él;

retoma su viaje;

la desorientación guía su caminar,
que de tanto tiempo de haber estado perdido,

es solo un deambular;

inseguro su paso, teme avanzar,
en ese suelo que se estremece a sus pies,

pero aún en la calma,

se mantiene quieto, mientras en si mismo,
busca el retazo de una idea,

o un presagio;

su mente aún no halla su destino;

pero insiste su cuerpo,

la carne siempre mas valiente que el pensamiento,

siguiendo a su impulso natural,
sigue caminando;

[mitad de cuadra]

cansado ya, se aferra al poste,
que protege la única luz,

que ilumina la calle (como puede),

porque su foco, ya cansado,
abraza la intermitencia;

y piensa,

que si la luz es débil,
para el que queda;

y que los días más lindos se quedaron atrás,

y el siguió,

y siguió,

siguió (caminando);

[final de cuadra]

una conversación pasa a su lado,
tal vez una mirada sobre el se haya posado,

pero creo que no era buena,

su cuerpo ahora carga a su mente,
que se quedó varios pasos atrás,

ya juntos los dos, ven hacia abajo;

[el ve hacia abajo]

ve sus pies,

ahora, junto a ellos, ve un abismo;

y en sus ideas,
no hay rastros de un destino,

ya no puede más,

ya no quiere más,

el cuerpo rendido se ve ante el mar de alquitrán,

su naufragio ha naufragado,
se ahoga su cuerpo,

sueña;

[despierta]

un auto acelera a su lado,

los ojos se abren,
la sangre en ellos, casi no les deja ver;

tendido en la calle,
alguien le tira unas monedas;

se para y solo piensa en que no puede pensar;

ve mucha gente reunida,
tal vez esperando algo,

pregunta,

y ahora sabe que hay un edificio en espera por una demolición,

el sabe que su cuerpo ya ha tenido la suya,

espera para ver caer el edificio,
desayuna destrucción;

se empolva su vista,

la gente emocionada festeja que no exista mas,
un rectángulo que nuble al horizonte,

se disipa la multitud,

y solo él queda;

y ve los cimientos que aún persisten,
y no piensa nada,

solo ve,

y se va;

camina,

la cuadra era mucho más fácil de lo que recuerda,

hay obreros arreglando los tres postes de luz que iluminan la calle,
[solo había un poste ayer]

llega al final de la cuadra,
y hay una gota de sangre en una baldosa;

[se toca el labio]

ve hacia abajo,

ya no hay un abismo,

mira hacia ambos lados para ver si no pasan mas autos;

cruza la calle,
y el se siente un beatle caminando por la cebra de la calle;

piensa que harrison era el mejor de los cuatro;

y piensa en que tal vez,

mañana volverá a ser un naufragio,

pero hoy es un barco en buen estado,
y el alquitrán se ha calmado;

[pronto tal vez venga la tempestad, de nuevo]

llega a la otra cuadra,

y tras muchos pasos,

se pierde entre la gente;

jueves, 3 de septiembre de 2015

Pronto

pronto,

pronto mi mente será olvido,

pronto mi vista será ceguera,

pronto mi piel perderá tersura,

pronto solo me iré quedando,

pronto quedaré yo solo,

pronto no (quedaré) seré;

y cuando ya no sea,
ni la reiteración sostendrá mi alma,

cansada del cautiverio en este cuerpo;

del recuerdo,
hartos estarán incluso mis olvidos;

la sangre, tan densa, 
no fluirá;

las manos pesarán sobre el latir,

el corazón ya no tendrá fuerzas;

las cenizas de mi vida,
serán llevadas por el viento;

no seré ni cuento,
ni canción;

de mi quedará la tribulación de un momento;

seré lágrimas ajenas,

la tristeza de otros,
mi cuerpo bajo tierra;

[tal vez semillas lleve en mí cuando caiga en mi sepulcro,
así de mi, rosas podré crecer y pueda darme flores a mi mismo]

y tal vez,

vuelva mi alma a sentir,

en aquel momento de la agonía,
donde aquellos que conocí,

vean su vida,

pasar en solo un segundo;

y sea yo,

un fragmento del mismo;

sea yo,
parte de otra vida;

aún queda tiempo,

aún soy,
y tengo a otros para ser,

pero pronto verdad, será mi presagio;

pronto polvo,


todos habremos de ser;

miércoles, 2 de septiembre de 2015

Seré Mañana

he de deambular por lo angosto,
de este estrecho pasillo,

con otros, iguales a mi;

qué umbral atravesarán mis pasos?
qué pórtico me dará descanso de la vida que el sol me sabrá dar?

[que aún no quema]

[en que mar nadaré luego de besar la tierra?]

aún no supe hallar la procedencia del olvido que comprende mi recuerdo;
ni el por qué de su fugacidad,

[cuáles pasos serán los que me lleven al próximo umbral?]

qué tiempo dará el reloj cuando tu mirada me incendie por primera vez?
qué cuerpo habrá mi sangre de quemar?

[qué cicatriz habrás de dejar en mi? // mi piel quemada será sanada por la luna]

que ayer ha de vivir mi olvido?

mis pasos anuncian que la tierra me ofrenda su jugo,
la forma primera;

[mis cofrades se han ido uno tras otro]

me he vuelto la única permanencia;

sobre mi bosquejo de mueca

[el labio entreabierto]

ha de verterse el mar;

impregnada de blanco,
mi palabra salará;

qué tiempo dará el reloj cuando despierte mi sed

[y me haga olvidar el mar que llevo en mi?]

el umbral ya atisbo;
mis últimos pasos ya doy,

[el sol me encandilará con su vida]

pronto agraciaré la vida de la luz,

atravieso el umbral;

ovulación,

[inicia la gesta]

mi olvido ha vuelto a nacer,
pero ya me he confinado a este vientre,

[eterno será el recuerdo;
              luego de ver la luz]

el primer alba que he de ver,

dará inicio a mi vida;

martes, 1 de septiembre de 2015

Luego

tras un sueño,

mi cuerpo alejado de toda realidad,

será golpeado por lo objetivo;

punzará mi rostro,
en mi boca nacerá un sabor extraño,

plagado de vida;

mis labios desangrarán rotos, mi palabra,

su decir, solo será dolor;

el goteo constante de otras bocas heridas,
crearán ríos de sangre helada,

que tantearán el suelo,

diálogo a diálogo;

el rojizo charco en que toda sangre habrá de desembocar,
será la conversación más pura;

ni aún el silencio confesará la belleza,

del improvisto del contacto,
de la naturaleza primera; 

mi esencia,

secándose en el piso,

contrastará con mi cuerpo débil,
rogando beber de ella;

mis labios desangrarán más rápido,

mi sed no se inmutará;

la conversación cada vez mayor será,

[será]

y mi cuerpo,

en silencio mutará;

y se maravillará con la belleza,
del contacto de la naturaleza primera;

el cuerpo se secará,

le seguirán sus pares;

la sangre en parte entera se habrá ido,

tal vez aquel charco de mi y de otros secándose en el piso,
sueñe más que todos nosotros;

antes de ser parte del viento;