I
la invención del milagro
cauteriza la herida abierta de la duda,
a la vez que dota a la espontaneidad
de un carácter eterno.
II
no traduje la huida,
era lengua primaria
la arena entre los dientes.
sal era nieve
para la encía que descubría el sacrificio
por amor.
III
la procesión del júbilo
desemboca en una bodega de horrores.
una única puerta
nos protege de donde el ruido permanece encerrado.
IV
la devoción por el deber
remienda
apariencias
previamente fabricadas.
V
sumergida, una cabeza se duplica
uniéndose por los labios.
el horizonte es silencio,
pero
no por eso
arrojar piedras
es lo mismo que tomar la palabra.
VI
los destellos de luz
que vi al torcer mis ojos hacia adentro
arroparon al vértigo
de fuga.
reparar el movimiento
es la dependencia de la aerodinámica.
la precisión de los impactos
no es revelada
hasta que el aire se corte por completo.
VII
las costillas son hélices,
dependiendo de la posición del pecho
es que tomamos vuelo
o nos vamos en picada.
¿estás conmigo?
¿a dónde vamos?