I
¿y que harán aquellos que sangraron su palabra
ante los pies de la omisión?
¿y que hará la sangre corriendo escaleras abajo, abandonada?
harán intento de disimulo
mientras quemando la madera,
su fuego traerá travesías que serán desenfundadas
de un habla poco fiable,
e interpretaciones,
de un oído ciego
que cuelga en el gesto mismo de la palabra;
lloran arboles, piedras,
los juguetes de los destetados,
privados de la facilidad,
salvajes cazadores
roen mi sangre seca
y hago intento de silencio
¿en que boca se habrá perdido este deseo,
en que manos, la uña que arañaba tu lenguaje?
¿en que manos deposité
la destrucción que tanto conservé?
tragedia decrepita,
casi tanteando el desorden,
grito vidrios rotos sobre rostros inocentes
sobre pozos que cavé buscando
lo que alguna vez enterré;
la noche tiene un ángel velando por su culo,
y yo a nadie, callando mis palabras,
hurtandome la voz
y hace silencio
la voz que no tengo
II
¿y que haré yo sangrando mi palabra
ante los pies de la omisión?
solo haré intento de disimulo
ante mi sangre corroída
ante mi voz hecha añicos
y ante la noche velada
en calma
pariendo el desastre una vez mas,
como si el inoperante ruido de todos estos siglos vanos
no importase;
masturbación, egoísmo,
y sobre el final,
soledad
del que enfrenta los ojos de un dios primitivo,
al que obligaron a callar
haciendo silencio
o intento del mismo;
Escrito con Bruno
No sé qué decirles...la voz que no tengo...enmudeció, fue omitida en un grito prohibido
ResponderBorraresas bellas palabras quedarán plasmadas en recuerdo hasta lo mortuorio de mi cuerpo;
ResponderBorrarmuchísimas gracias por leernos!